‘Gran Hermano’: Una concursante desvela el acoso sufrido por dos hombres en un tren

Hace unos días fue 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y a pesar de las numerosas reivindicaciones y los avances que ha habido a lo largo de los años, aún queda mucho por hacer. Por relatos como el de una ex concursante de ‘Gran Hermano’ nos damos cuenta de que se siguen produciendo situaciones de acoso a las mujeres. Se trata de Laura Velasco, quien ha contado a través de sus redes sociales el momento de acoso que ha sufrido mientras viajaba en un tren.

La ex gran hermana explicó que viajaba en un tren durante seis horas cuando dos jóvenes la acosaron sexualmente. Por si fuera poco, lanzaban mensajes pública y constantemente de que la violarían. “La putilla del 213” (por el número de su asiento) fue uno de los comentarios que no dejaban de decir y la razón por la que la andaluza decidió finalmente cambiarse de vagón y asiento: “Me siento mal, con miedo y asustada”, afirmaba.

Acaba de ocurrirme en un tren @Renfe en el que sigo montada hasta las 19:38 de la tarde.. Me siento mal, con miedo, asustada… pic.twitter.com/L8aW6HMQlu

— Laura Velasco 🦋 (@LauraGHRV) March 9, 2021

Según cuenta Laura Velasco, ella se subió al tren de Intercity de Renfe y al ver que su asiento estaba ocupado por los dos jóvenes, acabó sentándose delante de ellos para no tener que decirles que se movieran. “Desde que me siento escucho todo tipo de comentarios hacia mi físico, mi supuesto escote (voy con un chaleco de lana y cuello vuelto), mi cara o mi cuerpo”, empezó contando.

Después de escuchar varios comentarios que la hacían sentir incómoda, la ex participante de ‘Gran Hermano’ vio como los dos chicos hablaban con otra persona por teléfono que les decía: “¿Y la putilla del 213 qué?”. Acto seguido, tras las quejas del resto de pasajeros por tener el altavoz encendido, los jóvenes lo apagaron y respondieron: “Pero vamos, cuando llegue a Sevilla me detienen por violación o alteración del orden público”.

Una vez Laura escuchó esto, decidió hablar con el revisor, quien le propone a ella cambiarse de vagón y asiento en vez de a los dos acosadores. Por este motivo, la ex concursante de ‘Gran Hermano’ acabó su relato con una reflexión: “Una vez más, la mujer es el problema y a la que hay que apartar. Una vez más, una se siente como una mierda, insegura, y con miedo de lo que ocurrirá cuando llegue a Sevilla y me cruce con ellos en el andén”.